El alumno pudo realizar los seminarios y los exámenes de repaso tantas veces como quiso hasta que obtuvo el nivel que él consideró satisfactorio; ese es el resultado expresado como "número de ejercicios reales".

Se valoró como ejercicio definitivo el que obtuvo la mejor calificación, alcanzando el número expresado en la tabla como "número de ejercicios definitivos", que se corresponde con el número de ejercicios que se hubieran realizado si sólo se hubiera permitido un intento a cada alumno.

El número de pruebas que se han hecho en el cuatrimestre es de una magnitud tal, que es aquí cuando se puede apreciar la utilidad de los medios mecanizados como procedimiento de autoevaluación. Ningún equipo de profesores podría soportar esta sobrecarga en su tarea docente, ni aún dedicándose en exclusiva a la corrección de los ejercicios.