IV CONGRESO VIRTUAL HISPANO AMERICANO DE ANATOMÍA PATOLÓGICA IV-CVHAP

CONTENIDO

 

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SIALOBLASTOMA: REVISIÓN DE LA LITERATURA A PROPÓSITO DE UN CASO.

Silvia Salinas, Carolina Castillo, Pablo Pérez Alonso, Raquel S. Simón, Mercedes Patrón.

Dpto. Anatomía Patológica, Hospital La Paz, Madrid. Servicio  Anatomía Patológica, Hospital de Medina del Campo, Valladolid, España. 

IV-CVHAP 2001 PÓSTER-E - 051

Fecha recepción: 08/02/2001
Fecha publicación: 07/04/2001
 Evaluación: Ver "Taller de Cabeza y Cuello"

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RESUMEN

   INTRODUCCIÓN: Los tumores epiteliales congénitos de la glándula salival son poco frecuentes casos. Los dos primeros casos fueron descritos por Vawter y Tefft en 1966, que propusieron el término de embrioma por su aparición durante la vida fetal. Dos décadas después Taylor introdujo una nueva nomenclatura: Sialoblastoma, haciendo referencia a una neoplasia de células inmaduras que recuerda a la glándula salival embrionaria. Actualmente los tumores embrionarios se clasifican (Batsakis) en a- Adenomas similares a los de los adultos b-Carcinomas. c-Sialoblastomas, d-Hamartomas. 

   MATERIAL Y MÉTODO: Presentamos el caso de un recién nacido con una masa parotídea izquierda. La pieza quirúrgica fue fijada en formol e incluida en parafina, se realizaron cortes histológicos de 5 micras y para su estudio se utilizaron técnicas de tinción rutinarias y de inmunohistoquímica (S100, queratinas AE1-AE3, p53 y Ki-67). 

   RESULTADOS: La tumoración microscópicamente cumple los criterios del sialoblastoma. Estos tumores son potencialmente agresivos. El 25% de ellos infiltran nervios, vasos, parénquima vecino o metastatizan a ganglios regionales. Están descritas metástasis en ganglios linfáticos regionales pero en la actualidad no hay casos publicados con metástasis a distancia ni que hayan originado la muerte del paciente. El diagnóstico diferencial se debe hacer fundamentalmente con el adenoma de c. basales y con el carcinoma adenoide quístico, que muestran un comportamiento diferente. 

  CONCLUSIONES

  • 1) El término Embrioma no es sinónimo de sialoblastoma ya que hace referencia a TODOS los tumores que se desarrollan durante la fase embrionaria. 
  • 2) El sialoblastoma pertenece a uno de los cuatro tipos de tumores congénitos de la glándula salival que por sus características histológicas y de comportamiento debe considerarse una entidad en si mismo. 
  • 3) Es un tumor potencialmente agresivo pero sólo de manera local sin riesgo de metástasis a distancia. 
  • 4) Presenta problemas nosológicos y de diagnóstico diferencial.

Palabras clave: embrioma | sialoblastoma | congénito | adenomas | carcinomas | hamartomas
   

 

IMÁGENES

Figura 1- El tumor mostraba lóbulos irregulares con proliferación de células basaloides.

Figura 1

Figura 2- Se observaban abundantes nidos basaloides, con ocasionales empalizadas periféricas, rodeados por un estroma laxo inmaduro

Figura 2

Figura 3- Las células se distribuían formando cordones y túbulos que se originan a partir de los nidos epiteliales

Figura 3

Figura 4- Los túbulos mostraban ocasionalmente un material eosinófilo en su interior. En zonas existía un marcado patrón cribiforme

Figura 4


   

 

INTRODUCCIÓN

   Los tumores de la glándula salival en la infancia son poco frecuentes constituyendo el 3-5% de todos los tumores en esta localización (18). Son más frecuentes en la segunda década de la vida donde destaca el adenoma Pleomorfo. En el periodo neonatal predominan las neoplasias vasculares encabezadas por los hemangiomas y linfangiomas. Los tumores epiteliales congénitos son una verdadera rareza y durante mucho tiempo han presentado gran complejidad en su nomenclatura.
   

 

MATERIAL Y MÉTODOS

   CASO CLÍNICO: Recién nacido a término, de 38 semanas de edad gestacional sin antecedentes patológicos durante la gestación o el parto. Al nacimiento presentaba una masa no dolorosa, móvil, que asentaba en la región parotídea izquierda. Se realizó una parotidectomía total sin observarse adenopatías durante la intervención. Se ha mantenido libre de tumor durante 23 años.
   

RESULTADOS


   ANATOMÍA PATOLÓGICA:

   Macroscópicamente era una masa multilobulada, bien delimitada de 5x5 cm con una coloración pardo-blanquecina. No se observaban áreas de necrosis o hemorragia.

   El tumor se encontraba lobulado (Figura 1) y estaba constituido por nidos epiteliales, de células basaloides, de los que se originaban cordones y túbulos inmersos en un estroma fibromixoide laxo inmaduro (Figura 2 y Figura 3). Algunos de los nidos mostraban luces centrales con un material basófilo PAS+. Se observaba empalizada nuclear periférica focal y extenso patrón cribiforme (Figura 4). Las células de los conductos presentaban más citoplasma de aspecto eosinófilo. No se observaba pleomorfismo celular, mitosis, necrosis, ni invasión perineural, vascular ni de partes blandas.

   El diagnóstico inicial fue de adenoma de células basales congénito (Embrioma). Tras una revisión posterior del caso y debido a su gran similitud con la imagen histológica de la glándula salival embrionaria se diagnosticó de Sialoblastoma. Se realizaron técnicas de inmunohistoquímica (Citoqueratinas AE1-AE3, Vimentina, S-100, índice de proliferación Ki-67 y proteína P53). Observamos intensa positividad para las citoqueratinas a nivel de los nidos, cordones y conductos. El estroma mostraba positividad para la vimentina. la S-100 nos permitió identificar células mioepiteliales en la periferia de los nidos que no se reconocían con la HE. El tumor presentaba un índice de proliferación (Ki-67) inferior al 1% y no mostraba expresión de la proteína P53.
   

DISCUSIÓN

   Los tumores congénitos de la glándula salival son extremadamente raros, constituyendo el 0,25% de todos las neoplasias en esta localización (18). Fueron descritos por primera vez en 1966 por Vawter y Tefft (25) que propusieron la denominación de Embrioma atendiendo a su desarrollo durante la vida embrionaria y no a sus características microscópicas. Posteriormente Taylor (23) publicó un tipo de neoplasia congénita que mostraba como característica histológica su similitud a la glándula embrionaria. Entendiendo que este tumor era el resultado de la proliferación de células inmaduras o blastematosas propuso denominarlo Sialoblastoma para hacerlo análogo a los tumores blastematosos de otra localización (hepatoblastoma, nefroblastoma). Este tumor tiene características histológicas bien definidas (reflejadas en la Tabla 1).

   La presencia de nidos basaloides, que lo asemejan al adenoma de células basales, y el patrón cribiforme junto al ocasional carácter agresivo de la tumoración, que recuerda al carcinoma adenoide quístico, ha dado lugar a distintas denominaciones que han provocado una amplia confusión en la literatura: Híbrido adenoma de c. basales-carcinoma adenoide quístico (21, 26) carcinoma basaloide de bajo grado (1), carcinoma adenoide quístico y adenoma de c. basales (8, 18). Batsakis propuso una clasificación para los tumores congénitos atendiendo a su histología (3, 4, 14):
  1. Adenomas histológica y biológicamente iguales a los del adulto.
  2. Tumores que recuerdan a estadios preacinares de la glándula embrionaria y que reciben el nombre de Sialoblastomas.
  3. Hamartomas, que son proliferaciones desordenadas de todos los componentes maduros de al glándula salival.
  4. Carcinomas histológica y biológicamente idénticos a los de la edad adulta.


   En la literatura hemos encontrado 17 casos de Sialoblastoma (Tabla 2). Hemos incluido aquellos diagnosticados con los términos confusos a los que hemos hecho referencia antes y excluido aquellos (Tabla 3) que aparecían de manera tradicional en las anteriores series (7, 19) y que sin embargo no cumplen los criterios del Sialoblastoma. A dicha revisión le hemos añadido nuestro caso obteniendo un total de 18. No se observa predilección de sexo (9:9) y su lugar de presentación más frecuentemente es la parótida (13 casos) originándose ocasionalmente en la glándula submandibular (5 casos). No hay casos descritos en la sublingual.

   El 22% de los tumores mostraron una ó más recidivas tras la extirpación quirúrgica. 7 de los 18 mostraron agresividad histológica (mitosis frecuentes, necrosis, invasión perineural, vascular, de partes blandas o de ganglios regionales), sin embargo tan sólo 2 recidivaron. Esto induce a pensar que se trata de una agresividad potencial que puede ser erradicada con la primera cirugía. Entre los casos sin agresividad histológica también aparecieron 2 casos donde el tumor recidivó, esto podría deberse a una extirpación incompleta de la lesión. La potencialidad maligna de esta neoplasia tan solo es a nivel local, ya que no existen casos de metástasis a distancia ni que hayan originado la muerte del paciente.

   El Sialoblastoma con frecuencia muestra un tamaño intermedio (2-3 cm) pero en ocasiones puede adquirir grandes dimensiones como los descritos por Taylo R (15x12 cm), Sidiqqi (11x8 cm), Garrido (9x9 cm) y Vawter (7x9). Dicho tamaño no guarda relación con el grado de agresividad ya que de estos tan sólo uno recidivó (23), mientras que la mayoría de los que mostraban componente agresivo eran menores de 3 cm. Lo que si parece tener importancia es el tiempo que se deja evolucionar el tumor hasta la cirugía. Todos aquellos que no se extirparon en los primeros días de vida (1, 2, 7) mostraron signos de agresividad histológica con recidivas en 2 de los casos. El diagnóstico y tratamiento precoz reduce la potencialidad maligna del tumor. El diagnóstico diferencial debe realizarse con el adenoma de células basales y con el carcinoma adenoide quístico. La importancia radica en el diferente pronóstico que presentan estos tres tumores. El adenoma de c. basales puede estar constituido por nidos basaloides y túbulos, que no recuerdan a la glándula salival embrionaria ni muestran un estroma laxo e inmaduro. Es un tumor benigno que no tiene tendencia a recidivar y que aunque con mucha menos frecuencia que en los adultos también puede aparecer en el periodo neonatal. Los sialoblastomas que muestran marcado patrón cribiforme y carácter infiltrativo local pueden confundirse con el carcinoma adenoide quístico, no obstante el aspecto embrionario y la aparición neonatal (excepcional en el adenoide quístico) nos debe inclinar al diagnóstico de sialoblastoma
   

CONCLUSIONES

 
1. El término de Embrioma no es sinónimo de Sialoblastoma ya que hace referencia a todos los tumores congénitos de la glándula salival.

2. El Sialoblastoma es uno de los cuatro tipos de tumores congénitos, que por sus características histológicas y biológicas merece ser una entidad en si misma.

3. Es un tumor potencialmente agresivo a nivel local sin que origine metástasis a distancia.

4. El tratamiento quirúrgico precoz es el tratamiento de   

NOTAS AL PIE DE PÁGINA:

  
Correspondencia: Silvia Salinas. Dpto. Anatomía Patológica. Hospital La Paz, Madrid, España. mailto:silsalinas@yahoo.es
   

REFERENCIAS

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