IV CONGRESO VIRTUAL HISPANO AMERICANO DE ANATOMÍA PATOLÓGICAIV-CVHAP

CONTENIDO

 

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ENDOMETRIOSIS EN GANGLIO LINFÁTICO MESENTÉRICO, ASOCIADA A ENDOMETRIOSIS DE INTESTINO DELGADO.

Daniel Jesús Piccinni , Luis Santos Spitale , Luis Roberto Cabalier , María Elisa Dionisio de Cabalier.

II Cátedra de Patología y I Cátedra de Patología Facultad de Ciencias Médicas, Universidad Nacional de Córdoba. Córdoba, Argentina.

IV-CVHAP 2001 PÓSTER-E - 007

Fecha recepción: 08/12/2000
Fecha evaluación: 17/01/2001
Fecha publicación: 21/01/2001

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width=5 Título
width=5 Resumen
width=5 Introducción
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width=5 Caso Clínico
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RESUMEN


  La endometriosis ganglionar es un fenómeno infrecuente. Más raro aún es hallar endometriosis ganglionar asociada a endometriosis intestinal, especialmente cuando no se realizan múltiples secciones de los supuestos
ganglios afectados. Nuestro objetivo es presentar un raro ejemplo de endometriosis ganglionar asociada a endometriosis de intestino delgado, haciendo una revisión de lo publicado al respecto, rescatando la importancia de la tinción clásica con hematoxilina y eosina para el diagnóstico y analizando los posibles mecanismos etiopatogénicos. Presentamos el caso de una mujer de 38 años de edad, que es intervenida quirúrgicamente de urgencia por un cuadro de obstrucción intestinal con dolor, resecándosele un segmento de íleon con marcada estenosis. El material fue procesado con la técnica de rutina (inclusión en parafina y tinción con H-E). En el examen microscópico se detectaron focos endometrósicos en la pared del segmento intestinal extirpado. Además, en la
porción de mesenterio que acompañaba a uno de los cortes de la pared intestinal, había un pequeño ganglio linfático con una micro-inclusión endometrósica. Tanto la endometriosis ganglionar como la intestinal, aisladas o asociadas,
son inusuales. En nuestro caso el hallazgo de un foco endometrósico ganglionar fue un hecho fortuito y sólo apareció en uno de los corte realizados, no volviéndose a repetir en cortes subsiguientes. En cuanto a la patogenia, se podrían contemplar las teorías clásicas de la endometriosis. También sería factible nuestra hipótesis, sobre el origen del tejido endometrial en una célula pluripotencial, quizá de origen celómico, presente en intestino y ganglio linfático a la vez, con capacidad de diferenciación epitelio-estromática.

Palabras clave:  endometriosis ganglionar endometriosis de intestino delgado ganglio mesentérico célula pluripotencial
  

INTRODUCCIÓN


  Las publicaciones sobre los sitios donde se ha detectado endometriosis son numerosas. Sin embargo, es escaso lo reportado de endometriosis ganglionar. Con respecto a esta última, pueden citarse endometriosis en ganglios linfáticos retroperitoneales (1), pélvicos (2-4), parametrio (5) y abdomen (6, 7). Con respecto a la última localización citada, cabe destacar que las endometriosis ganglionares reportadas estuvieron asociadas a endometriosis del intestino. En uno de estos reportes había endometriosis en intestino grueso y en los ganglios pericólicos (6). En el otro (7), la endometriosis afectaba al intestino delgado, aunque no se pudo establecer, debido a no disponer del artículo original o de su abstract, donde estaban localizados los ganglios endometrósicos. Estos dos casos hallados de endometriosis ganglionar asociada a endometriosis del intestino, contrastan con el hecho más frecuente que es encontrar endometriosis de intestino no asociada a endometriosis ganglionar (8-14). El diagnóstico morfológico de endometriosis, ganglionar o de otros sitios, no ofrece dificultades especiales, simplemente hay que hallar, como es bien sabido, glándulas y estroma endometriales con la coloración habitual de hematoxilina y eosina. No obstante y como es de actualidad, se han buscado algunos marcadores, encontrándose positividad para citoqueratina, EMA, estrógenos y progesterona (6). Del análisis de lo publicado, surge también el hecho que no es siempre fácil encontrar la endometriosis ganglionar, siendo necesario a veces obtener múltiples muestras de los ganglios linfáticos con el fin de descubrir los focos endometrósicos (6).
  

MATERIAL Y MÉTODOS


  El material, proveniente de intestino y ganglio linfático, se procesó con la la técnica habitual de inclusión en parafina y tinción con hematoxilina y eosina.
    

IMÁGENES DEL CASO 

       Fig. 5. Ganglio linfático. Panorámica. Glándula endometrósica microquística.

Fig. 5 


    
    
    
    

Fig. 6. Ganglio linfático gran aumento. Epitelio y estroma  endometroides a

Fig. 6  

 


    Fig. 1. Segmento intestinal con pared engrosada y luz puntiforme en uno de

Figura 1

Fig. 3. Mayor aumento. Foco endometrósico en plena túnica muscular.

Figura 3
    
    


    Fig. 2. Foco endometrósico en la muscular. Mucosa de intestino delgado en la

Figura 2

Fig. 4. Panorámica del corte en el portaobjetos. Ganglio en mesenterio con

Figura 4

 

CASO CLÍNICO

 
    Paciente de sexo femenino de 38 años de edad, con historia de dolor abdominal durante la menstruación, que acudió a la consulta con intenso dolor epigástrico y un cuadro de íleo. Ante esta situación de abdomen agudo, se decidió efectuar una laparotomía exploradora. Durante el acto quirúrgico se detectó engrosamiento y rigidez del íleon terminal, con despulimiento de su serosa, resecándose el segmento intestinal afectado. En el examen patológico, el segmento intestinal extirpado, de 7cm de longitud, presentaba serosa despulida y engrosamiento de la túnica muscular, con notable reducción de su luz, llegando a ser puntiforme en un sector (Fig. 1). En el estudio microscópico se hallaron numerosos focos endometrósicos, especialmente en la túnica muscular, la que se presentaba engrosada (Fig. 2 y 3). Se decide entonces realizar, para su estudio microscópico, más cortes del segmento intestinal, detectándose en uno de ellos, en la porción de mesenterio que lo acompañaba, un ganglio linfático de 4mm con una inclusión endometrósica cerca de la cápsula (Fig. 4). Este foco de endometriosis ganglionar, estaba constituido por una glándula microquística rodeada por el correspondiente estroma endometrioide (Fig. 5 y 6).  
    

DISCUSIÓN
 
  Aportamos con nuestro caso un raro ejemplo de endometriosis ganglionar, que coincide en su rareza con las escasas publicaciones al respecto, especialmente en lo que se refiere a la endometriosis ganglionar asociada a la de intestino (6, 7). Determinar la presencia de endometriosis sólo requiere encontrar epitelio y estroma endometriales, utilizando la técnica de rutina de inclusión en parafina y coloración con hematoxilina y eosina. El empleo de técnicas especiales como la inmunohistoquímica (6) sólo tiene valor complementario y no es indispensable para el diagnóstico histopatológico. Un hecho que hay que destacar, como figura en una de las publicaciones citadas (6) y que se llevó a cabo en nuestro propio caso, es la necesidad de efectuar, cuando se halla endometriosis intestinal, múltiples secciones de los ganglios linfáticos regionales. Esta práctica podría haber servido en los casos reportados de endometriosis intestinal aislada, para aumentar la incidencia de endometriosis intestinal asociada a la ganglionar. Un fenómeno que aún no se ha dilucidado y que es apasionante discutir, es la forma en la que se desarrolla endometriosis en un ganglio linfático. Las teorías mas importantes sobre la histogénesis de la endometriosis (15) en general comprenden: 1) regurgitación del endometrio por las trompas durante la menstruación, 2) metaplasia del epitelio celómico y 3) diseminación de partículas endometriales por vía linfática o hemática ("metástasis benigna"). En el caso de la endometriosis ganglionar asociada a la de intestino, es tentador suponer que material endometrial de la pared intestinal penetró en los vasos linfáticos y así llegó, según el caso, hasta los ganglios mesentéricos o mesocolónicos. No obstante, Es difícil creer que un trozo de tejido endometrósico, benigno y completo, pueda penetrar en un vaso linfático. También es dificultoso aceptar, que epitelio y estroma se propaguen independientemente y luego se junten en el ganglio para armar el foco endometrósico. Sería más lógico suponer, que una célula pluripotencial del foco endometrósico intestinal, con capacidad de diferenciación epitelial y estromática, viajó vía linfática hasta el ganglio, haciendo luego en el una bidiferenciación epitelio-estromática. Es factible además, que esta misma célula pluripotencial puede haber estado presente a la vez en el ganglio y en el intestino, como un vestigio embrionario (¿celómico?) y reaccionar en ambos sitios a un estímulo que la indujera a una diferenciación endometrósica. De todas formas, todas estas hipótesis podrán servir como objetos de futuros estudios de investigación. 
    

NOTAS AL PIE DE PÁGINA

  Correspondencia: Daniel Jesús Piccinni, II Cátedra de Patología, Facultad de Ciencias Médicas, Universidad Nacional de Córdoba. Córdoba, Argentina. mailto:daniel_piccinni@excite.com

 

REFERENCIAS


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5. Kostic P. Endometriosis of the lymph nodes of the parametrium. Minerva Ginecol 1968; 20:703-6.

6. Insabato L, Pettinato G. Endometriosis of the bowel with lymph node involvement. A report of three cases and review of the literature. Pathol Res Pract 1996; 192: 957-61.

7. Tiemann A, Bosse A, Finke U, Zumtobel V. Small intestine endometriosis with lymph node involvement as a rare cause of acute abdomen. Chirurg 1992; 63: 219-21.

8. La Greca G, Catanuto G, Pontillo T, Sichel I, Di Carlo I, Russello D, Latteri F G. Ileal endometriosis. A clinical case and a review of the literature. Chir 2000; 21: 12-6.

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10. Wickramasekera D, Hay DJ, Fayz M. Acute small bowel obstruction due to ileal endometriosis: a case report and literature review. J R Coll Surg Edinb 1999 Feb; 44: 59-60.

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14. Szucs RA, Turner MA. Gastrointestinal tract involvement by gynecologic diseases. Radiographics 1996; 16: 1251-70.

15. Cotran RS, Kumar V, Collins T. Robbins. Patología estructural y funcional. Sexta edición. McGraw - Hill - Interamericana. 28023 Aravaca (Madrid) 2000. Página 1102.